Gasoil a domicilio en España en 24 horas

Teléfono:

959 497 082 - 639 341 327

Correo electrónico:

coria@coria-oil.com

Blog & Noticias
Inicio / Blog & Noticias

¿Dónde y cuando se construyó el primer pozo de petroleo?

 

Sin duda la industria del petroleo ha sido el negocio más lucrativo de la historia de la humanidad, y pese a que todos somos conscientes de la necesidad de abandonar los combustibles fósiles por el bien del planeta y de nosotros mismos, todavía hoy sigue siendo la principal fuente de energía que mueve la civilización y el negocio más lucrativo sobre la faz de la tierra. Hoy día el petroleo se extrae con tecnología avanzada que permite realizar perforaciones kilométricas en el suelo para llegar hasta donde se encuentre el preciado oro negro, ya sea en tierra, o en mar con las plataformas petrolíferas, al lo largo y ancho de todo el globo, pero esta fiebre del oro negro que perdura desde hace decadas tuvo su punto de inicio en el espacio y el tiempo.

 

Nos tenemos que remontar a la segunda mitad del siglo XIX en Estados Unidos, en Pennsylvania. Sería Edwin Drake un soñador proveniente de una familia humilde el encargado de construir el primer pozo de petroleo de la historia y dar inicio al mayor negocio de la historia de la humanidad. Pero, ¿cómo y por qué decidió construir este pozo? En aquella época empezaba a estudiarse el «aceite de roca» , se trataba una sustancia aceitosa que brotaba de la tierra en algunos puntos y que era áltamente inflamable. Había lugares como «Oil Creek» ( Arroyo Petroleo) en Español , situado en el pueblo de Titusville, que era conocido por estar contaminado por este «aceite de roca» , estas contaminaciones recurrentes del agua afectaba a diversas actividades que se desarrollaban en la zona, como las explotaciones de sal. Uno de los afectados era Samuel Kier un químico de EEUU que cansado de las molestias que le ocasionaba decidió estudiar qué era aquello y de donde venía. Después de varios experimentos logró refinar el petroleo y extraer queroseno, un producto muy inflamable que se quema sin producir humo ni olor.

 

A raiz de este descubrimiento, varios emprendedores vieron el potencial económico de la extracción de crudoy de esta forma George Bissell y Jonathan Eveleth decidieron montar la primera compañía dedicada a ello, la Pennsylvania Rock Oil Company (Luego Seneca Oil). Sabía que brotaba de la tierra y necesitaban encontrar lugares en los que se pudieran extraer grandes cantidades, por este motivo contrataron a Edwin Drake, que pese a no tener conocimientos sobre minería o geología, tenía gran capacidad para el manejo de todo tipo de máquinas además de una grandisima capacidad de trabajo, así en 1858 Drake inició las investigacines en Titusville, al principio haciendo pequeñas excavaciones en forma de zanjas en zonas donde alguna vez podía haber brotado el maná negro, pero sin éxito, tras varios fracasos llegó a la conclusión de que había que perforar más profundo, por lo que planeó la perforación de un pozo similar a los de las minas de sal. Por aquel entonces no existía la tecnología específica para la perforación de pozos de petroleo, por lo que los contratiempos fueron innumerables, a cada uno de ellos la inventiba de Drake iba dando solución añadiendo nuevos elementos que luego se convertirían en un estandar para la creación de pozos petrolíferos durante décadas, por ejemplo para evitar que el pozo colapsara las perforaciones se iba haciendo dentro de un tuvo metálico que se iba insertado a la par que el taladro perforaba, sin embargo, tras más de un año de trabajar sin descanso, cuando llegaron a los 10 metros de profundidad (una hazaña para la época) Bissell y Eveleth desistieron y abadonaron el proyecto, quedando Drake sin financiación para poder continuar, sin embargo con aportaciones de familiares y amigos y con un préstamo consiguió continuar adelante, convencido de que encontraría petroleo, así más de un año y medio después, lograría  alcanzar el preciado crudo el 27 de agosto de 1859 a la profundidad de 21 metros.

 

Aunque en aquella época no existía el motor de explosión, el uso para el alumbrado público en sustitución del aceite de ballena lo hacía lo bastante lucrativo, de esta forma el primer pozo de Drake arrojaba 30 barriles de crudo diarios, que al precio de la época 20 dolares por barril suponían unos ingresos de 600 dolares diarios, toda una fortuna para la época.

 

Tras aquello, se desató la fiebre del oro negro y en poco tiempo, toda la ladera boscosa en la que se encontraba el pozo de Drake se llenó de Pozos de otros buscadores de crudo que trataban de imitar la hazaña de Drake.

 

La búsqueda y perforación de crudo no tardó en expandirse por todo el mundo, convirtiendo en millonarios a muchos y arruinando a otros. Una serie de malas decisiones por parte de Edwin Drake, como no patentar sus inventos para la perforación, o no comprar suficientes parcelas de terreno en la zona, junto con alguna que otra inversión ruinosa dío al traste con su fortuna, muriendo pobre en 1880. Pese a haber muerto pobre, su persistencia permitió el nacimiento de uno de los mayores negocios de la historia y el uso de la fuente de energía por excelencia hasta hoy, entrando para siempre en los libros de historia.

 

Una gran historia digna de una película.

 

Pozo de Edwin Drake  

De izquierda a darecha, fotografía del Pozo de Edwin Drake y foto de Edwin Drake.

Comparte en tus redes sociales:

últimos Artículos

Scroll al inicio